Ejercicio para aumentar el valor y la confianza con la asistencia del Arcángel Miguel
El Arcángel Miguel nos ayudará a erradica los
efectos del miedo, proporcionándonos protección, valor y coraje.
Si estás pensando en hacer cambios en tu vida,
tales como dejar un trabajo o una relación, pídele que te brinde orientación y
ayuda para avanzar sin temor. Además, también puede ayudarte a encontrar el
propósito de tu vida, y guiarte respecto a qué acciones seguir.
Pasos:
Siéntate o recuéstate cómodamente, con la
columna vertebral lo más derecha posible. De preferencia, haz este ejercicio al
aire libre. Si eliges hacerlo sentado, apoya tus pies en el suelo, y sin cruzar
las piernas. Cierra tus ojos, coloca tus
manos sobre tus muslos con las palmas abiertas hacia arriba.
Inhala profundo, retén y exhala, al ritmo que
puedas. Como mínimo repite estas respiraciones concientes 10 veces, siendo lo
ideal hacerlo más de 30 veces.
Eleva tus
manos al cielo, ábrelas con las palmas hacia arriba, imitando a una antena, y
convoca a tu ángel guía. Si conoces su nombre, repítelo tres veces, sino,
simplemente di “ángel de luz y amor” tres veces, con profunda paz y amor. Invítalo
a que abra el portal de conexión con las dimensiones superiores de luz y amor. Como
variante puedes solicitar la asistencia del ángel del arco iris.
Junta tus
manos, uniendo palma con palma por sobre tu cabeza, bájalas lentamente pasando
por el frente de tu rostro, tu garganta y déjalas en el mudra de oración a la
altura del corazón. Ábrelas, apoyando las palmas en tu pecho. Respira profundo
y exhala rápidamente, tres veces.
Ahora, convocaremos
al Arcángel Miguel, diciendo con fé:
"Arcángel
Miguel, Arcángel Miguel, Arcángel Miguel, yo te invoco y te convoco. Por favor, préstame tu
espada y escudo de paz, y permíteme que me apoye en tu fuerza y valor. Ayúdame a conocer y
sentir que estoy a salvo y protegido emocional, física, financiera, enérgica y
espiritualmente, gracias, gracias, gracias porque así es, hecho está. Amén"
Puedes continuar en esta postura haciendo
respiraciones concientes el tiempo que así lo sientas. Luego comienza poco a
poco a normalizar tu respiración, a mover tus pies, manos, cuello, y finalmente
abre tus ojos.
Si lo haz hecho, ¡comentá! y si te gustó, ¡compártelo!
¡Abrazos!
Nota: Este ejercicio tiene sus
bases en el oráculo de “terapia angelical” de Doreen Virtue, y ha sido
modificado siguiendo la guía de los ángeles.